COMARCAS
5/2/2019
Montalbán y La Iglesuela del Cid, dos municipios que velan por la piedra seca
La Unesco ha declarado esta técnica constructiva del sur de Europa Patrimonio Cultural Inmaterial
Redacción
En el término de Montalbán, en Cantalobos, hay una ruta marcada y con paneles informativos de elementos de piedra seca donde se pueden ver construcciones como la casilla Mas del Hambre
La Unesco inscribió a finales del pasado mes de noviembre la técnica de la piedra seca en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial y que incluye a diversas Comunidades Autónomas en España, entre ellas Aragón, y a Croacia, Chipre, Francia, Grecia, Italia, Eslovenia y Suiza. La declaración casi pasó inadvertida al solaparse con las tamborradas de España, entre ellas la Ruta del Tambor y el Bombo del Bajo Aragón, pero en la provincia de Teruel hay muy buenos ejemplos de la piedra seca. Montalbán y La Iglesuela del Cid son señeros en patrimonio y actuaciones en esta técnica constructiva popular como es la piedra en seco.
El alcalde de Montalbán, Carlos Sánchez, manifestó que el Ayuntamiento va a seguir potenciando el patrimonio de la piedra seca y que revisará la cartelería existente para ofrecer más información con el objetivo de poner en valor la piedra seca de Montalbán, que se centra, sobre todo, en Cantalobos, donde existen numerosas muestras de casetos y muros de piedra seca.
Montalbán cuenta además con un monolito junto al edificio Itaca que rinde homenaje a la piedra seca y al congreso internacional que se celebró en la localidad en 2006 sobre esta técnica constructiva.
El pasado mes de diciembre el Ayuntamiento de Montalbán aprobó una moción presentada por Ganar Montalbán donde se recuerda que Montalbán fue el primer municipio aragonés que participó en una iniciativa transnacional en 2006, junto a Francia e Italia, “para la puesta en valor de este importante patrimonio comunitario, que tuvo como realizaciones más importantes un congreso internacional de la piedra seca, con sus correspondientes publicaciones, y la restauración de un espacio singular de piedra seca por voluntarios locales: el conjunto etnológico de Cantalobos, con su señalización correspondiente”.
En la moción presentada aprobada por unanimidad de los asistentes se acordó “revisar el estado de conservación del conjunto etnológico de Cantalobos y del monolito, además de realizar las labores de conservación correspondientes, si fuera necesario. Editar algunos materiales impresos de carácter turístico, basados en la piedra seca de Cantalobos, aprovechando la Declaración de la Unesco. Comunicarlo al Parque Cultural del Río Martín, para que forme parte también de sus actuaciones y sea considerado un recurso más a añadir al Parque Cultural en el ámbito de la señalización, inversión, edición de materiales. También se acordó remitir una comunicación a la Dirección General del Patrimonio Cultural, de la DGA, recordándole la iniciativa transnacional europea de la localidad de puesta en valor de la piedra seca, indicando la buena disposición y disponibilidad del pueblo de Montalbán para albergar seminarios y jornadas científicas, y acoger talleres, campos de trabajo y todas aquellas iniciativas que desarrolle la DGA al respecto”.
El director gerente del Parque Cultural del Río Martín, José Royo, precisó ante la moción presentada que Montalbán fue el primer municipio aragonés que participó en la iniciativa transnacional junto a Francia e Italia a través del Parque Cultural del Río Martín.
José Royo recordó igualmente que el Parque Cultural del Río Martín con fecha del 30 de junio de 2016 se adhirió a la candidatura para la inscripción en la lista de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, mostrando, además, su conformidad con la comunicación del Gobierno de Aragón por la cual forma parte de la candidatura internacional de la técnica constructiva tradicional de la piedra seca ante la Unesco.
En esta línea, Royo destacó que la Asociación del Parque Cultural del Río Martín trabaja con los ayuntamientos integrados en el parque para la conservación y valorización de la técnica de la piedra seca, habiendo participado en el proyecto de conservación de construcciones de la piedra seca en Cantalobos y articulando una ruta senderista cultural en torno a este patrimonio. “Participamos también en la organización del X Congreso Internacional de la Piedra Seca organizado en Montalbán en 2006. Igualmente editamos un libro en 2006 titulado Hacer hablar a las piedra: La piedra seca en el Parque Cultural del Río Martín y en la Comarca de las Cuencas Mineras de J.C. Gordillo, A. Pinaud y J. Royo”.
El alcalde de Montalbán reseñó que sí hay visitantes que se interesan por la piedra seca y apuntó que es un buen recurso patrimonial para pasar una jornada al aire libre y conocer la piedra seca. Añadió que con el Parque Cultural del Río Martín se mirará que acciones se pueden tomar más para promover y poner en valor el patrimonio que se tiene de la piedra seca.
La Iglesuela
Por su parte, el alcalde de La Iglesuela del Cid, Fernando Safont, destacó que la declaración de la técnica de la piedra seca Patrimonio Cultural Inmaterial de la Unesco es una oportunidad que se tiene que aprovechar. “Es una oportunidad que brinda Europa y que hay que aprovechar”, destacó.
Recordó que La Iglesuela del Cid es el municipio que más piedra en seco tiene por metro cuadrado en toda Europa. El Gobierno de Aragón ya declaró la piedra seca de La Iglesuela del Cid como “Bien de Interés Cultural” en el Decreto 23/2002 de 22 de enero de 2002.
Fernando Safont expuso que su municipio es pionero en elaborar un plan especial de la piedra seca al que le falta actualmente la publicación y que este plan especial bien le puede servir a Patrimonio del Gobierno de Aragón para poder acometer actuaciones para el mantenimiento y potenciación de la piedra seca.
El primer edil de La Iglesuela del Cid apuntó que uno de los problemas que tiene esta técnica de la piedra seca es el coste de su mantenimiento al no haber personas cualificadas en la técnica de colocación de la piedra en seco. “El mantenimiento de la piedra en seco es costoso por la falta de personas cualificadas y de empresas que se dediquen a ello, pese a que existe mucha faena porque los animales y las tormentas de agua deterioran muros o construcciones que se deberían restaurar”, comentó.
Pese a la falta de profesionales en piedra en seco, el Ayuntamiento de La Iglesuela del Cid ha realizado dos talleres de empleo de piedra en seco, uno de ellos conjuntamente con Villafranca del Cid, Castellón, otro municipio señero en piedra seco, pero en la Comunidad Valenciana. Tanto La Iglesuela del Cid como Villafranca del Cid cuentan con dos rutas de piedra en seco, que podrían unificarse, avanzó Safont.
Para abordar el trabajo de conservación de la piedra en seco, Fernando Safont abogó por dotar de subvenciones con convenios a las actuaciones de restauración para no perder patrimonio. “Se tienen que meter recursos económicos si no queremos perder patrimonio de piedra seca”. En La Iglesuela del Cid hay piedra seca tanto de propiedad municipal como de propiedad privada.
Ruta de la piedra en seco
La ruta tiene su inicio en el centro de La Iglesuela del Cid, desde la Torre de los Nublos o del Exconjurador. Se remonta el Barranco del Canto, repleto de pequeños huertos y se adentra por el Azagador de Franch en dirección al Puerto de las Cabrillas, para desviarse hacia Las lomas. Se está en el corazón de las construcciones de “piedra seca”. Están formadas por bancales, puentes, cabañas de pastor (Chozos), escaleras, todas las piedras están colocadas sin usar ningún tipo de argamasa, simplemente mediante la superposición de piedras. En origen sirvieron como refugio a campesinos y pastores y se usaron como establos y almacenes agrícolas. Se continúa en dirección a la Ermita de Nuestra Señora del Cid, tras haber cruzado el Camino del Puntal, el Azagador del Predicador, y el azagador de la Vereda de la Leche. Junto a este azagador hay un peirón, sobre el cual existe una leyenda, relativa a una huella de Babieca (caballo del Cid).
Poco más adelante se llega a Santuario de la Virgen del Cid, su construcción original se remonta al siglo XV, en un escarpado donde hubo un antiguo poblado íbero y un antiguo monumento funerario romano. Se erigió esta ermita en honor a una talla de la virgen allí encontrada en el siglo XII. A pocas decenas de metros se encuentran restos de una alberca, excavada en la piedra, conocida por “Los Baños”. Se Regresa hacia el pueblo por un camino asfaltado, que recorre el Barranco de la Fuente de los Sabares (Barranco del Cid), donde se ven las distintas terrazas de cultivos. Se desvía por el antiguo camino, para pasar por el viejo puente medieval, realizado en piedra seca con un solo ojo y en arco de medio punto. Se sigue hacia la Iglesuela del Cid, pasando junto a varias cuevas, conocidas como “Casetas del Cura”. Ya a la entrada del pueblo se ve un chozo y una bancada de piedra seca, construido en 2010 por el taller de empleo de la localidad.
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