El autoempleo se abre camino en los pueblos de las Cuencas Mineras | |
Asesoramiento y apoyo de agentes sociales
En la comarca de las Cuencas Mineras desde hace poco más de un año, están surgiendo pequeños negocios emprendidos por gente joven que ha decidido tomar las riendas de su futuro y apostar por quedarse en su territorio para montar su empresa, una forma de crear su propio puesto de trabajo sin esperar a que otro tome la iniciativa por ellos, es el autoempleo.
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Con el asesoramiento y el apoyo de agentes sociales como OFYCUMI, grupo que gestiona el LEADER en la comarca, o de la Asociación de Empresario comarcal, ACECMI, estos emprendedores se han decidido a crear su empresa; algunos han vuelto a sus orígenes, otros han visto en esta tierra un nuevo lugar donde empezar esta nueva aventura, todos con el mismo propósito: conseguir trabajar en lo que les gusta.
Así, los hermanos Mallén han montado una cafetería restaurante en Montalbán, Sofía Alcutén ha abierto Más que cuentos, una nueva papelería en Utrillas, Diego Barea se ha hecho cargo de la gestión del Hotel el Molino de Aliaga, Sergio Marzo abrió un taller de reparación de automóviles en Utrillas, Víctor Fernández puso en marcha una cafetería en Montalbán, Marcos Jiménez creó Geoventur, una empresa de turismo activo en Utrillas, las hermanas Julia y Ángela abrieron en Castel de Cabra la Fonda rural El Espliego, con bar y 12 habitaciones, Elisabeth Vargas montó su despacho de pan en Utrillas, Rubén se instaló en Escucha, creando 3 puestos de trabajo, con Alexa Química SL, Javier Artal y José Manuel Delgado abrieron en Utrillas un taller de chapa, pintura y reparación mecánica de vehículos y Marcos Ballarín apostó por Montalbán para montar su tienda-taller de informática hace apenas un mes.
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LOS EJEMPLOS DE EMPRENDEDORES RELACIONADOS CON MONTALBÁN
____________________________________________________TIENDA-TALLER DE INFORMÁTICA-PAPELERÍA "PC-DOC M&M"Marcos Ballarín: "Al pueblo le damos lo que tenía que ir a buscar fuera" | |||
Autoempleo en las Cuencas Mineras
Marcos Ballarín ha abierto hace menos de un mes una tienda en un local ubicado en la Plaza Carlos Castel de Montalbán con una doble actividad, por un lado estamos ante un taller de microinformática que también vende material y productos informáticos y por otro es papelería y tienda de regalos en la que también comercializa artículos de artesanía.
S.F./ Montalbán
19/05/2014 |
Marcos Ballarín ha abierto hace menos de un mes una tienda en un local ubicado en la Plaza Carlos Castel de Montalbán con una doble actividad, por un lado estamos ante un taller de microinformática que también vende material y productos informáticos y por otro es papelería y tienda de regalos en la que también comercializa artículos de artesanía. Lo que pretende con esta iniciativa es "dar al pueblo lo que tiene que ir a buscar fuera".
Los trámites han costado un poco, pero cree que es más fácil emprender en esta zona que en una gran ciudad.
Entre sus propuestas hay varios proyectos, alguno ya en marcha como el modding, que es el arte de hacer un ordenador en un objeto que nada tiene que ver con una torre de ordenador, "es algo curioso que llama mucho la atención".
Marcos ha hecho su primer modding en Montalbán convirtiendo una caja de cervezas, "de quintos", en un ordenador que se puede ver en su tienda-taller, y ya ha recibido un encargo de hacer otro similar pero esta vez en una caja de cervezas mahou. Además realiza ordenadores a medida con la configuración adaptada según las necesidades que cada uno demande.
Marcos Ballarín vino a esta localidad turolense procedente de Barcelona, después de haberla conocido en el verano y está encantado con la vida que aquí lleva, "estaba ya un poco harto de la ciudad, de los humos" y reconoce que ha encontrado la tranquilidad que siempre había querido.
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FAMILIA MALLÉN. CAFETERÍA-RESTAURANTE "EL GRANERO""Innovamos pero tenemos en cuenta los gustos tradicionales" | |||
Autoempleo en las Cuencas Mineras
Estos jóvenes emprendedores, Aitor de 23 y estudiante de informática y Ángel de casi 20, con estudios de Hostelería en la Escuela de Miralbueno de Zaragoza con la especialidad de cocina, han decidido dar este paso, con el apoyo y asesoramiento de sus padres, en una fechas "muy buenas, y más este año" señala Aitor
S. F. / Montalbán
19/05/2014 |
Estos jóvenes emprendedores, Aitor de 23 y estudiante de informática y Ángel de casi 20, con estudios de Hostelería en la Escuela de Miralbueno de Zaragoza con la especialidad de cocina, han decidido dar este paso, con el apoyo y asesoramiento de sus padres, en una fechas "muy buenas, y más este año" señala Aitor, ya que comenzaron su andadura días antes de la Semana Santa y reconocen que "la gente del pueblo se está portando muy bien con nosotros", ya que están empezando a tener ya una clientela más o menos fiel que hace que los inicios sean más fáciles.
El establecimiento está en la travesía de Montalbán por lo que se encuentra en una zona de paso, lo que permite tener una cierta regularidad en las comidas de diario, "aunque siempre existe esa incertidumbre" matiza Ángel, que se encarga de la cocina, ahora acompañado por su madre que le ayuda en estos inicios.
Los hermanos Mallén han tenido la suerte de que para poner en marcha el negocio han contado con la guía de su padre, algo que les facilitó la tarea a la hora de solucionar muchas trabas que se iban planteando. Aunque lo que fue algo más arduo fue el tema de habilitar el local en el que iban instalarse, ya que debían adaptarlo a la normativa existente, añade Aitor.
El establecimiento tiene espacio de cafetería, una zona de restaurante con capacidad para unos 30 comensales y una terraza al aire libre. Pero si de algo se muestran orgullosos es de su menú de fin de semana, que han ido perfilando y adaptando poco a poco al gusto de los clientes, y que casi podía considerarse como un menú degustación con tres entrantes, ensalada con gulas y rulo de cabra, volavant de salmón que elabora Ángel en su integridad, masa y todo, para terminar con un Rissotto de trufa y un segundo, a elegir entre: codillo en salsa de oporto o lubina en salsa de marisco, y para postre un tartín de manzana, con bola de helado de turrón y espuma de piña, todo un lujo. El menú lo renuevan cada 15 días con el fin de crear expectativas entre los comensales y mostrar nuestras ideas, señala Aitor.
Lo más difícil ha sido adaptarse a los gustos de la gente, "porque cuando sales de la escuela de hostelería haces cosas muy creativas que igual luego no funcionan", comenta Ángel, ahora "tratamos de innovar pero sin sacar a la gente de lo que está acostumbrada", aunque él sigue poniendo sus toque creativos en cada uno de sus platos, como unos fideos de arroz o cualquier otra guarnición decorativa, sobre todo en los postres porque la repostería es una de sus pasiones.
De cara al verano quieren dar un toque diferencial a su establecimiento y van a crear una carta de cocteles y otra de helados artesanos elaborados por ellos mismos.
Lo que más les gusta es el contacto con la gente e ir mejorando cada día, porque como ambos señalan "a veces, la forma de aprender es equivocarse y corregir los errores".
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Rubén Campillo: "El Ayuntamiento de Escucha me ha ayudado muchísimo"
Rubén Campillo es murciano y llegó a estas tierras turolenses hace ahora algo más de un año con el fin de instalarse en la zona de las Cuencas Mineras con su familia, pero traía bajo el brazo una interesante idea, la creación de su empresa de envasado de productos químicos. |
Es Rubén Campillo un de los llamados nuevos pobladores, porque en su caso, aunque existía cierta vinculación con el territorio turolense puesto que parte de la familia de su mujer vivió en la localidad de Montalbán donde conservaban una casa familiar y ahora ellos están viviendo allí con sus dos hijos.
La decisión
La decisión de instalar la empresa en la localidad de Escucha se debió a las facilidades que desde el Ayuntamiento del municipio citado le proporcionaban, sobre todo a la hora de alquilar una nave a un precio asequible en la que invertir para adecuarla a su negocio, además Rubén Campillo reconoce "el ayuntamiento me ha ayudado muchísimo", explica el emprendedor.
La empresa Alexa química SL lleva funcionando desde el pasado mes de enero y ya ha creado hasta tres puestos de trabajo, uno para desempeñar labores propias de la oficina, y los otros dos empleos son para dos operarios, cuyo único requisito que se les pedía era tener el carnet de carretillero, porque el resto de la formación corre a cargo de la empresa, tal y como ha matizado el propio Campillo.
Si las cosas en términos empresariales y de negocio siguen funcionando según las previsiones manejadas, llegarán a final de año con 8 trabajadores y para el 2015 podrían tener hasta 15.
El trabajo que desempeñan es el envasado de determinados productos químicos como aceite de linaza o aceite de teka, que les llegan en camiones cisterna, lo descargan de 5000 en 5000 litros en una gran "batidora" para homogeneizar el producto y luego rellenan los envases según las necesidades del cliente. Trabajan básicamente para grandes superficies y tiendas especializadas y más adelante tiene la idea de crear una marca blanca para los profesionales de la pintura.
Pero para llegar hasta este punto ha tenido que solventar antes muchos problemas de financiación, "ya que las entidades bancarias, aún dándote algún crédito, tardan mucho en aprobarlo, lo cual hace que se vayan incrementando mucho los gastos".
Lo mejor de venir a una zona rural es el cambio tan bueno, asegura, sobre todo para los niños, considera un lujo el que su hija pueda ir andando tranquilamente por una calle, porque no hay tan apenas tráfico, aunque también les llama la atención, sobre todo en invierno, las escasas personas que circulan por sus calles.
geniall ole ole y olee
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