CAPITAL HISTÓRICO CULTURAL

MONTALBÁN....CAPITAL HISTÓRICO-CULTURAL DE LA COMARCA "CUENCAS MINERAS"(Teruel).-
LEY 28/2002, de 17 de diciembre, de creación de la Comarca de Cuencas Mineras....
Art 2:" Capitalidad.1.La Comarca de Cuencas Mineras tiene su capitalidad en el municipio de Utrillas, donde tendrán su sede oficial los órganos de gobierno de la misma.
La capitalidad histórico-cultural tiene su sede en el municipio de Montalbán."

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miércoles, 8 de abril de 2015

ENTREVISTA A JOSE LUIS GONZALVO, UN MONTALBINO COMPROMETIDO CON LA ACCIÓN SOLIDARIA CON EL PUEBLO SAHARAUI

Fuente informativa: Diario de Teruel
Sara Falo, Montalbán, Comarca CC.MM

Comarcas

La asociación quiere que al menos 20 niños tengan acogida en la provincia

ASAPS lanza Vacaciones en paz para los niños saharauis 

-José Luis Gonzalvo Oliete, vicepresidente de ASAPS.


La asociación ASAPS (Acción solidaria con el pueblo saharaui) con sede en Andorra y con unos 120 socios, acaba de lanzar una nueva edición de su proyecto de colaboración con el Sahara llamado "Vacaciones en paz"
Sara Falo/Montalbán
07/04/20
La asociación ASAPS (Acción solidaria con el pueblo saharaui) con sede en Andorra y con unos 120 socios, acaba de lanzar una nueva edición de su proyecto de colaboración con el Sahara llamado "Vacaciones en paz", con el fin de dar acogida en pueblos de la provincia, por lo menos, a una veintena de niños que viven habitualmente en campamentos saharauis. Este proyecto se realiza en colaboración con la Delegación Saharaui en Aragón y existen otras ONG que la desarrollan en el resto de la comunidad. 
Esta actividad de acogida la inició ASAPS en el año 2000 y en los últimos 3 años están encontrando ciertas dificultades para cubrir todas las expectativas creadas desde los campamentos. Se trata de un programa de acogida temporal de niños de 7 a 12 años, desde finales de junio hasta finales de agosto y el único requisito que necesita la familia es que quiera dar a estos niños la oportunidad de conocer una cultura diferente.
Desde ASAPS, destacan que los objetivos que se pretenden alcanzar con este proyecto en concreto son tres: que estos pequeños conozcan otras formas de vivir, el sanitario y el cubrir unas necesidades alimenticias básicas para su desarrollo, según datos de la Media Luna Roja en los campamentos se registran entre mujeres y niños unas tasas alarmantes de malnutrición y anemia. También se pretende, al realizar la acogida en estas fechas, que los más pequeños pasen fuera del desierto el verano, los meses más duros del año por las altas temperaturas que se alcanza en los campamentos, llegando a los 53 grados centígrados.
Los niños que llegarán este verano a las comarcas Andorra-Sierra de Arcos y Cuencas Mineras, principalmente, provienen del campo de refugiados situado en Wilaya en Tinduf, en la zona de Argelia. El poder participar en este programa es un aliciente para los niños, ya que los responsables de juventud de los campamentos eligen por edades a aquellos que reúnen ciertos requisitos, entre ellos el tener buenas notas en sus estudios.
José Luis Gonzalvo, vicepresidente de la asociación, insistió en que a las familias que acogen no les supone ningún desembolso económico, ya que el gobierno de Aragón, a través del IASS, lo subvenciona. El niño en acogida se incorpora a todos los efectos a la tarjeta sanitaria de la familia y los desplazamientos también están cubiertos. Sólo deben encargarse de la manutención y cuidados en general, como si fuera su propio hijo. 
La asociación pone a disposición de las familias interesadas en participar en esta experiencia dos teléfonos de contacto 619312751 y 665564360, en donde podrán recabar toda la información que necesiten.
Además de este programa, ASAPS desarrolla otros proyectos sociales en los campos de refugiados, en febrero ocho miembros de la asociación visitaron los campamentos para realizar un seguimiento de estos proyectos. El que más tiempo llevan colaborando es en el de alimentos, este año recibieron una subvención de la Comarca Andorra-Sierra de Arcos de 5000 euros destinado a cubrir estas necesidades. Otro que también tiene el apoyo de las instituciones, en este caso de Caja Rural de Teruel, es el destinado a medicamentos, alimentación e higiene infantil, para lo que están en continuo contacto con los hospitales de los campamentos, a los cuales han destinado 2700 euros. Estos productos los hacen llegar a través del Ministerio de Cooperación saharaui, aprovechando la caravana humanitaria que se programa para noviembre y febrero, aproximadamente.
El proyecto de taller textil y la Brigada Jaima son dos programas que se centran, el primero en las mujeres y el segundo en los niños y jóvenes, con el fin de darles recursos y ocupación.
Este pasado año se puso en marcha un nuevo proyecto llamado Miradas, destinado a dar cobertura a los discapacitados intelectuales de los campos de refugiados. Comenzaron en Dajla, en donde equiparon un centro y formaron a gente local con la colaboración de los profesionales de ATADI, estos fueron los encargados de dar a conocer las técnicas que utilizan en sus centros aquí en Teruel, para que los locales puedan, a su vez, extender estos conocimientos al resto de centros de discapacitados existentes en los diferentes campamentos.
Tras la Marcha Verde de Marruecos en 1975, miles de refugiados saharauis huyeron hacia una zona desértica junto a la región argelina de Tinduf, a unos 50 kilómetros de la frontera con el Sáhara Occidental. Según AC
entrevista- josé luis gonzalvo oliete vicepresidente de ASAPS
¿Cómo entra en contacto con la asociación?
Hace 9 años decidimos participar en esta experiencia de tener un niño saharaui en acogida y nos enganchamos toda la familia. El primero que tuvimos ya tiene 18 años, en febrero estuvo mi mujer en el campamento con él viéndolo. Pero por nuestra casa en Montalbán han pasado dos niños más.
¿Qué dificultades puede encontrar una familia que decide acoger?
Cuando vienen con 7 años, como primera vez, quizá sea un poco complicado. Para ellos todo es desconocido, empezando por el idioma, aunque lo cierto es que ellos lo aprenden enseguida. Más difícil es acatar nuestras normas ya que las suyas son diferentes. Todo lo comprendes mejor cuando viajas a los campamentos y convives con ellos. Pero eso es solo el primer año, luego ya saben lo que tienen que hacer.
¿Suelen repetir las familias?
Lo normal es que sí, coges un niño o una niña con 7 años y lo sigues trayendo hasta los 12, ves cómo van creciendo, les coges cariño.
¿Qué aporta esta experiencia?
Personalmente como familia nos ha enriquecido, nos hemos implicado los cuatro miembros de la familia. Hemos podido profundizar y conocer los problemas del pueblo saharaui, que ya son 40 años de olvido. A mí me gustaría que no se olvidara, que las generaciones más jóvenes conocieran mejor esta realidad del Sahara.
¿Qué situación nos encontramos ahora en los campamentos?
Ahora la situación real es que existen muchas necesidades, viven de la ayuda humanitaria que les llega a través de la cooperación internacional de las diferentes ONGs que trabajamos en la zona. Hay una fuerza de la ONU que debería velar por los derechos humanos de los habitantes de los campamentos, pero lo cierto es que sus derechos se vulneran constantemente. Lo peor es la falta de ocupación, como ellos mismos dicen "el día es largo, la vida no".

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